Desde el 1° de abril, todos los comerciantes deberán discriminar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y otros impuestos nacionales indirectos en las facturas. La medida busca mejorar la transparencia fiscal y permitir que los consumidores conozcan la presión impositiva sobre los productos y servicios adquiridos.
La disposición, que forma parte de un régimen de transparencia impulsado por la Agencia de Control y Recaudación Aduanera (ARCA), fue establecida en la Resolución General 5614/2024, publicada en diciembre de 2024. A partir de esta fecha, los comercios deberán detallar los impuestos incluidos en el precio final.
Aunque las grandes empresas ya deben cumplir con esta obligación desde enero de 2025, los pequeños y medianos comerciantes tendrán hasta el 1° de abril para adaptarse. Aquellos que emiten comprobantes electrónicos a través de plataformas como Facturador Móvil ya contaban con esta opción, mientras que el resto de los comerciantes tiene hasta el próximo mes para implementarla.