Siete provincias del Norte Argentino se quedarán sin uno de sus proveedores de naftas y gasoil, debido a que la empresa Refinor dejará de refinar petróleo en su complejo Campo Durán, ubicado en Salta.
Esta medida es consecuencia de un prolongado estado de crisis que se atribuye en particular a la alta capacidad ociosa que el complejo industrial venía arrastrando por la falta de disponibilidad de petróleo y gas suficientes para procesar, lo que en los últimos meses se tornó insostenible y se materializó en un proceso de retiros voluntarios que significó la salida de 100 de sus 400 trabajadores.
La empresa informó que se trata de una “decisión estratégica que marca una nueva etapa”, con miras a “reconvertir su modelo de negocio con el objetivo de adaptarse a los desafíos actuales y aprovechar las oportunidades que ofrece la matriz energética”.
Como parte de ese proceso, resolvió “discontinuar las operaciones de refinación en el Complejo Campo Durán”.
A pesar del impacto en el entramado industrial del NOA, aseguró que mantiene el compromiso de “continuar siendo un actor clave en el desarrollo energético de la región”, en una reconversión que podría derivar en la orientación del negocio hacia la producción de biocombustibles a partir de materias primas, tales como la caña de azúcar.