El presidente Javier Milei deberá comparecer ante la Justicia para explicar los motivos detrás de sus ataques en redes sociales contra Ian Moche, un niño de doce años con autismo, conocido por su activismo y charlas sobre la condición.
La denuncia, presentada por la madre del menor, Marlene Spesso, y el reconocido abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez, pone en el centro de la escena la insensibilidad del mandatario frente a un menor de edad con discapacidad.
Los hechos se desencadenaron cuando Milei publicó un mensaje en sus plataformas digitales, acusando a Ian Moche de ser parte de una “operación política” orquestada contra su gobierno.
La publicación, que incluía la imagen del niño, generó un repudio generalizado y es el eje de la acción judicial.
Para Gil Domínguez, la agresión del presidente hacia Ian es inaceptable. “Ian fue agredido”, sentenció el letrado, enfatizando la gravedad del hostigamiento a un niño cuya única culpa es visibilizar el autismo y abogar por la inclusión.
La denuncia busca no solo la eliminación del mensaje presidencial, sino también sentar un precedente sobre el uso de las redes sociales por parte de las figuras públicas, especialmente cuando se trata de menores vulnerables.
Este episodio reaviva el debate sobre la responsabilidad ética y legal de los funcionarios públicos en el ámbito digital, como así también la necesidad de proteger a los niños de la exposición y el hostigamiento en plataformas masivas.