No se descarta la posibilidad de postergar los aumentos de las tarifas de luz y de gas durante todo el invierno, período en el cual el consumo energético se dispara y, en consecuencia, las facturas alcanzan costos difíciles de pagar.
¿Una señal de gradualismo del gobierno liberal libertario? No, simplemente una posible medida más para afianzar la desaceleración de la inflación y patear para adelante un nuevo golpe a los flacos bolsillos de los argentinos. Ergo, la moderación del índice de precios minoristas es un capital que el gobierno de Javier Milei procura resguardar.
«No tomamos ninguna determinación todavía, pero puede ocurrir», dijo el vocero presidencial, Manuel Adorni.