Durante el mes de julio, una familia tipo de cuatro miembros necesitó $1.079.375 para cubrir sus gastos básicos y no caer en la línea de la pobreza. Estos datos, reflejan un aumento constante en el costo de vida, que impacta directamente en el poder adquisitivo de los jujeños.
Según el informe de la Dirección Provincial de Estadísticas y Censos (DIPEC), la Canasta Básica Total (CBT), que se utiliza para medir la pobreza, experimentó un aumento del 0,6% en julio en comparación con junio y en lo que va del año, subió un 20%, mientras que la variación interanual, de julio de 2024 a julio de 2025, fue de un 38,5%.
Siendo así, una persona sola necesitó $349.312 para no ser pobre.
Por otra parte, en el caso de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que determina el umbral de indigencia, los números también son desfavorables.
En julio, una familia necesitó $481.515 para no ser considerada indigente. La CBA subió un 0,5% respecto a junio, acumulando un 19,1% en lo que va del año y un 34,1% en la comparación interanual.
Los datos por persona reflejan la misma tendencia, ya que, para no ser indigente, una persona requirió $155.830.
Estos montos evidencian la creciente dificultad para las familias y los individuos de la Provincia de Jujuy de acceder a una alimentación y servicios esenciales, destacando la urgencia de medidas que puedan mitigar el impacto de la inflación en los hogares.