En atención a un potencial crecimiento de la economía y el achatamiento del déficit fiscal, el objetivo de Javier Milei se estaría materializando recién en 2042, según advierte el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) que, además, toma en cuenta que según concluya el nivel de gastos de los tres niveles de gobierno en 2024, que sería del 33%, en 2025 este se mantendría igual en términos del PBI, porque se proyectan incrementos del 5% en las erogaciones, contra un crecimiento de la economía de igual magnitud.
También puntualiza, que se tiene que el peso relativo del gasto público nacional podría ser de 17,7% del PBI en 2024, lo que implicaría un descenso de 4 puntos porcentuales respecto al año 2023.
En ese sentido, plantea que el peso relativo del gasto público provincial podría ser de 12,9% del PBI, lo que derivaría en una baja de 2,5 puntos. A nivel municipal, podría ser de 2,9%, descendiendo 0,6 puntos.
De cumplirse estas proyecciones, el peso relativo del gasto público consolidado argentino podría bajar 7,1 puntos porcentuales del PBI, descendiendo desde 40,6% del PBI en el año 2023 al 33,5% del PBI en 2024.