El caso escandaloso de la criptomoneda #$LIBRA que tiene a la figura del presidente Javier Milei como protagonista, sigue generando repercusiones en el escenario político y judicial, proyectando su incidencia en la opinión pública a tal punto que consultoras privadas se abocaron a medir el clima social que este tema desató.
En este sentido, un relevamiento de la consultora Zuban Córdoba muestra que el 60% de los argentinos encuestados considera que Milei “estafó” a los inversores de $LIBRA.
Por otra parte, un estudio de Sentimientos Públicos, refleja que el 53% de los consultados cree que el presidente fue “cómplice” en alguna medida de lo ocurrido con el token que difundió en sus redes sociales.
La misma encuesta, señala que el 57% opinó que las criptomonedas son “una estafa tecnológica” y que por lo tanto “deberían estar prohibidas”.
Mientras los argentinos dan rienda suelta a su malestar y decepción, no sólo por lo hecho por el presidente en el caso de la cripto, sino también por ser víctimas de una estafa electoral de la casta, el abogado Gregorio Dalbón presentó una solicitud para incautar los teléfonos celulares del presidente Javier Milei, su secretaria general, Karina Milei, y el vocero presidencial, Manuel Adorni, con el fin de realizar peritajes sobre sus comunicaciones y archivos digitales.
El requerimiento fue dirigido al fiscal Eduardo Taiano, quien lleva adelante las actuaciones investigativas.
Para el letrado, Karina Milei habría mantenido reuniones con Mauricio Novelli, uno de los principales implicados en la maniobra investigada.
Además, advirtió que, en conversaciones filtradas, Hayden Davis afirmó que controlaba a Milei a través de sobornos a su hermana.