El rumbo de las políticas económicas de Javier Milei afecta sin piedad al mercado laboral. Así lo refleja la pérdida de 25.600 empleos registrados durante octubre último, alcanzando a los sectores público y privado y casas particulares.
El informe de Situación y Evolución del Trabajo Registrado del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), muestra que en comparación con 2023, se destruyeron 198.100 puestos de trabajos asalariados (-1,9% interanual).
Esta caída es producto, básicamente, del retroceso del sector privado (-2%) y del personal de casas particulares (-4,6%).
El sector público, en cambio, mostró una caída moderada en relación a las mencionadas previamente (-1,4%).
La contracara de la destrucción de trabajo de calidad, fue la creación de puestos precarios que subió 3% (+90.800) en el empleo independiente, impulsado principalmente por el monotributo social (+11,7%), seguido de un 1,1% de monotributistas y 0,6% de autónomos.
Desde septiembre de 2023, en el sector formal y privado inició una etapa de destrucción neta de empleo. Esta tendencia se intensificó significativamente durante el primer trimestre de 2024, con una variación mensual promedio de -0,5%. No obstante, a partir de abril de 2024, la contracción del empleo comenzó a moderarse, ya que durante el segundo trimestre la caída mensual promedio se redujo a -0,2%, según el relevamiento SIPA.





































