La medición realizada por la fundación Libertad y Progreso, explica que en octubre los precios estacionales jugaron a favor del IPC, impacto que se revirtió en noviembre.
Además, varios precios regulados volvieron a registrar subas.
De esta manera, en los primeros once meses del año, el IPC acumula una suba de 113%, mientras que en el mismo período del año pasado fue de 148,2%.
En cuanto a la variación interanual, esta alcanza el 167,3%, marcando así la séptima desaceleración consecutiva y bajando 122,1 puntos porcentuales desde el máximo de 289,4% interanual registrado en abril.
En cuanto a las proyecciones para diciembre, se espera que la inflación se mantenga relativamente estable, en torno al 3%, motivada por el efecto estacional de fin de año, lo que se compensará parcialmente por los primeros efectos de la anunciada eliminación del impuesto PAIS.
Para Libertad y Progreso, la inflación sigue claramente una tendencia de convergencia al 2% del crawling-peg.
Asimismo, aborda la mejora de la macro, señalando que lentamente se empieza a reflejar en la micro.





































