Aunque Javier Milei haya decretado el fin de la recesión, en el contexto se su relato apartado de la realidad, es inapelable la contracción apreciable de todas las actividades económicas en el país, arrasa el consumo, el empleo, la producción y los ingresos.
En el curso de la presente semana, unidades de negocios de empresas de diversos rubros, fueron fuente de malas noticias.
El ingenio Ledesma, en Jujuy, despidió a 165 obreros, con el objeto de recuperar algo de competitividad de cara al “recorte de sus gastos corrientes”.
Siguiendo con el sector sucroalcoholero, en Salta, la empresa Seabord Energías Renovables y Alimentos, que administra el ingenio El Tabacal, despidió 24 trabajadores.
Por otra parte, Nestlé paralizará su planta de Villa Nueva, Córdoba, donde elabora distintos tipos de leches, medida que afectará a 183 trabajadores que se tomarán vacaciones en ese período.
Nestlé, tercera fábrica en el mundo que desarrolla fórmulas infantiles con el formato UHT, necesita reducir los volúmenes de producción, principalmente por una baja en las exportaciones y una adecuación a la demanda local.
En otro orden, las tres empresas fabricantes de neumáticos en Argentina enfrentan severos problemas de exceso de stocks, motivo por el cual procuran frenar el ritmo de producción.
A las dificultades que venían exhibiendo Bridgestone y Fate, se sumó ahora Pirelli, que paralizará transitoriamente sus actividades.
La capacidad productiva actual de la factoría Pirelli, ronda los 7.000 neumáticos diarios, una cifra mínima para mantener la planta funcionando, pero al no existir casi ventas, se sigue acumulando stock.





































