Los valores de frutas y verduras no registran aumentos significativos en la provincia de Jujuy desde hace tres meses, según afirmaron feriantes de la capital. Rubén Coronado, vendedor de la Feria Campesina del barrio Mariano Moreno, indicó que los productos mantienen precios accesibles para los consumidores, a pesar del contexto inflacionario.
«La lechuga se vende a $1.000 por kilo, el brócoli a $1.000, el coliflor a $1.500 y la acelga a $3.000», detalló Coronado, quien también destacó ofertas como la espinaca a $1.600 o 2 por $3.000. Las papas, cebollas y tomates se consiguen a 2 kilos por $1.000, mientras que la zanahoria y la remolacha rondan los $1.600 por paquete.
En cuanto a las frutas, los precios varían según la estación. La naranja y la mandarina están a $1.000 la docena, y las de mayor tamaño alcanzan los $1.500. Las manzanas, dependiendo de la variedad, se venden entre $1.500 y $1.600.
Los feriantes atribuyen esta estabilidad a una buena producción regional y a la venta directa del productor al consumidor, que reduce costos intermedios. La situación se diferencia del comportamiento de precios en supermercados, donde los aumentos han sido más marcados.





































