Materializada la aprobación del Régimen de Incentivos a Grandes Inversiones (RIGI), se prevé para 2025 el arribo de 7.500 millones de dólares que serán inyectados en el sector minero, con especial interés en la producción e industria del litio.
El mapa nacional del RIGI muestra que Jujuy, Salta, Río Negro, Mendoza, San Juan y Chaco, ya concretaron su adhesión a dicho régimen.
Catamarca, San Luis y Neuquén el tema sigue bajo discusión parlamentaria.
Chubut, en cambio, adhirió al RIGI, sin embargo a la minería.
Por otra parte, entre las provincias que se pronunciaron a favor pero sus trámites de adhesión se encuentran stand by, están Corrientes, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y Misiones.
Santiago del Estero, Buenos Aires, Tierra del Fuego y La Pampa, directamente rechazaron el RIGI.
La Agencia Internacional de Energía estima que la demanda de litio se multiplicará entre 12 y 42 veces hacia 2040, en el marco de un proceso atado a la transición energética.
La tonelada de litio cotiza actualmente y en términos generales en unos 11.000 dólares, valor lejano a los 80.000 dólares que llegó a registrar en 2022, debido a la menor demanda de vehículos eléctricos, la reducción de inventarios de baterías de litio en China y un exceso de oferta ante el inicio de operaciones de nuevos proyectos.
En esta línea, la Secretaría de Minería hizo saber que en el curso de los primeros siete meses de 2024, las exportaciones de litio registraron una baja del 34,7%, en comparación con el mismo período de 2023.
No obstante el complicado panorama descripto, la demanda de litio para la transición energética se intensificará y plantea hipótesis de escasez en todos los escenarios.
Para la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), el RIGI “llega en un momento clave” para los proyectos de litio.





































