Argentina se prepara para un cambio significativo en sus cajeros automáticos, que a partir del 28 de junio comenzarán a incorporar un nuevo sistema inclusivo.
La medida, en línea con la Directiva (UE) 2019/882, busca garantizar el acceso equitativo a los servicios bancarios para todos los ciudadanos, poniendo especial énfasis en las personas con discapacidad visual, auditiva o motriz.
La iniciativa representa un paso adelante en materia de inclusión, transformando la experiencia en los cajeros automáticos para hacerla más accesible y sencilla.
Entre las principales adaptaciones se destacan:
Pantallas de alto contraste y menús simplificados, diseñados para optimizar la lectura y comprensión por parte de todos los usuarios.
Guía por voz y teclados en Braille. Herramientas fundamentales para personas no videntes o con baja visión, que facilitarán la navegación y operación.
Instrucciones en diversos formatos. Los cajeros ofrecerán indicaciones en formatos visuales, auditivos y táctiles, adaptándose a las necesidades individuales de cada usuario.
Botones de mayor tamaño y mejor ubicación. Pensados para facilitar el uso a personas con movilidad reducida o que se desplazan en silla de ruedas, mejorando la ergonomía y accesibilidad.
Se estima que estas modificaciones no solo impactarán positivamente en la inclusión de personas con discapacidad, sino que también harán más intuitivo y amigable el uso del cajero automático para la totalidad de los usuarios, simplificando las transacciones bancarias cotidianas.
Este avance subraya el compromiso del sistema bancario argentino con la equidad y la accesibilidad, buscando construir una sociedad más inclusiva donde los servicios financieros estén al alcance de todos.