Los salarios de los trabajadores del sistema formal, experimentaron una caída del 14,9% desde noviembre de 2023, previo a la devaluación que convalidó la gestión de Javier Milei apenas iniciada. Así lo refleja un estudio elaborado por el Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA).
Además, el relevamiento explica que el brusco salto del tipo de cambio abrió las puertas a una importante aceleración de la inflación, proceso que pulverizó el ingreso de los trabajadores en diciembre y enero. Así las cosas, el derrumbe real del salario llegó a ser de 21,3% en el primer mes del año y alcanzó el 23,8% si el poder de compra es medido en alimentos.
En otro tramo de su informe, CIFRA advierte que tras ese shock la profunda recesión funcionó como un freno para las subas de precios. En ese marco, algunas negociaciones paritarias pudieron recuperar parte de lo que habían perdido, lo que se muestra en el promedio como un mínimo repunte relativo.
Por otra parte, la pérdida de poder adquisitivo en el sector público fue mayor a la que se verificó en el sector privado (-21,3% vs -11,2%).
En cuanto al salario mínimo, vital y móvil, sufrió una caída incluso mayor, alcanzando un alarmante 28,8% entre noviembre de 2023 y mayo del año en curso.
En comparación con noviembre de 2019, los ingresos reales de los trabajadores formales retrocedieron un 24,2% (y 32% medido en alimentos), los del sector público se contrajeron casi 30%, mientras que los del privado lo hicieron en un 20,9%.