Cabe destacar, que este dato se potencia que la desaparición de 10.000 kioscos y almacenes, lo que se traduce en la pérdida de 160.000 puestos de trabajo en el sector.
En este sentido, el Frente Productivo Nacional advirtió que el derrumbe del consumo interno, el aumento de los costos de servicios y las dificultades para exportar debido a un dólar poco competitivo, pusieron a las Pymes al borde de la extinción.
En tanto, la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) sostiene que la segunda mitad de 2024 es “especialmente dura” para las Pymes.
Este escenario guarda relación con la continua contracción de la demanda interna, que golpea de lleno en las ventas de comercios minoristas y servicios.
A todo esto, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) calcula una caída del 13,2% en las ventas de comercios Pymes, cifra que refleja el impacto de la recesión sobre el consumo.




































