Impactó en la caída la cantidad de feriados que hubo en el mes, el del 17 de junio por la conmemoración del fallecimiento de Martín Miguel de Güemes, y el puente por el Día de la Bandera que generó un fin de semana largo de cuatro días.
Por otra parte, el Día del Padre ayudó a repuntar los productos vinculados a esa fecha, pero esto sólo se dio en los días previos. No hubo venta posterior, como habitualmente sucede. Además, el consumidor buscó comprar en cuotas, con mucha demanda del programa Cuota Simple.
En Alimentos y bebidas, los comercios indicaron que la caída del consumo se debió a que mucha gente se volcó a los mercados mayoristas en la búsqueda de mejores precios.
Esto sugiere que, en el contexto actual, los comerciantes priorizan las intervenciones directas que pueden mejorar su competitividad y eficiencia operativa sobre opciones de financiamiento más favorables.
En otro orden, los mayores desafíos identificados por los comerciantes son la falta de ventas y los altos costos de producción y logística.