Las vacaciones de invierno que acaban de concluir, dejado un saldo más que positivo para el turismo jujeño y un protagonista indiscutido se consolidó como un ícono de la región: el Tren Solar de la Quebrada.
Este innovador medio de transporte no solo superó las expectativas, sino que se posicionó como uno de los principales atractivos de la provincia, registrando una ocupación del 99% y transportando a más de 6.100 pasajeros a lo largo del mes.
El éxito fue tan rotundo que el servicio funcionó con pasajes agotados durante casi todas las jornadas. Los números hablan por sí solos: el 75% de los visitantes fueron turistas nacionales que eligieron Jujuy como destino, mientras que los jujeños representaron el 15% y los extranjeros el 10%, evidenciando la capacidad del tren para atraer a un público diverso y de distintos orígenes.
Este logro es solo la primera etapa de un proyecto mucho más ambicioso, diseñado para que el Tren Solar se instale como una propuesta permanente en el calendario turístico nacional e internacional.
Con una capacidad de 72 pasajeros por viaje, el tren ofrece un recorrido único de 42 kilómetros, conectando localidades emblemáticas de la Quebrada como Volcán, Tumbaya, Purmamarca, Posta de Hornillos, Maimará y Tilcara.
Lo que hace de esta experiencia algo excepcional, es su sistema “Hop On Hop Off”, que permite a los pasajeros subir y bajar del tren a su gusto entre las 9:10 y las 20:30.
Esta flexibilidad brinda a los visitantes la libertad de diseñar su propio itinerario, explorando mercados de artesanías, museos, deleitándose con la gastronomía local o embarcándose en excursiones pedestres para sumergirse por completo en la belleza y la cultura de la región.
El Tren Solar de la Quebrada no es solo un medio de transporte, sino una experiencia turística integral que ha llegado para transformar la forma en que se descubre el corazón de Jujuy.