Personal técnico y profesional del INTA en Jujuy y Salta realizó este jueves una jornada de visibilización en Plaza Belgrano para denunciar el desfinanciamiento del organismo y el riesgo de cierre de programas esenciales. La preocupación crece por posibles despidos masivos que podrían afectar a más de 1.500 empleados en la región.
Ezequiel Balduci, ingeniero del organismo, describió la situación como “crítica y con alto riesgo para las fuentes laborales”. Por su parte, Andrés Longoni, del IPAF NOA, afirmó que programas clave como ProHuerta, Cambio Rural y el Instituto de Agricultura Familiar ya enfrentan cierres o paralización.
Los trabajadores señalaron que las decisiones se adoptan sin consulta previa a las bases ni a la dirección nacional del INTA, y advirtieron sobre la pérdida de autonomía institucional. “No estamos en contra de la modernización, pero se necesitan procesos participativos”, subrayaron.
El INTA cumple un rol central en el desarrollo de tecnología y asistencia a pequeños productores rurales, especialmente en zonas alejadas y vulnerables del norte argentino.